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gaviotas y arte IV

15 Abr

Post dividido en partes – consecuencia de verborrea extrema por contención forzada y de larga duración.

Para volver al buen tiempo, dejo atrás la sala de exposiciones y os dejo algunas fotos de esta semana, durante la cual hemos tenido un programa especial de entrenamiento por la tarde para nuestra actividad de Leiskule, término noruego que designa una especie de campamento al que van todas los chicos noruegos en algún momento de la educación primaria por una semana y hacen distintas actividades. Lo ofrecemos también en nuestro colegio, y cada uno de los estudiantes forma parte de un grupo que lidera una actividad un día a la semana, desde ahora hasta el invierno del año siguiente. A mí me tocó kayack, mi primera opción y ya os podéis imaginar cómo disfruté estas tardes en el fiordo con un grupo muy divertido. Menos mal que el tiempo hizo lo posible por acompañar el evento – incluso nos tiramos al fiordo para rescatarnos los unos a los otros…

Hoy acabó todo: tuvimos conejillos de indias (en el buen sentido de la palabra – estamos agradecidos), chicos de Flekke que se prestaron a salir al fiordo con nosotros y ponernos a prueba. Creo que salió bastante bien y ellos también se lo pasaron bien. También la exposición de Arte fue desmontada hoy, y me di cuenta del hecho (bastante dramático, en mi opinión) de que los estudiantes no se pueden llevar sus obras – falta de sitio en la maleta. Sin embargo, ellos lo parecen llevar bien. Además de quemas, nos encontramos un hombre de arcilla sentado mirando hacia el fiordo, y en la arena, debajo de la ventana del estudio de Arte, desenterramos varias piezas, no sólo de este año, pues algunas ya llevaban flora incluida. Una experiencia muy filosófica…

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PS: Feliz Día de la República – ya sé que me he retrasado un poco, pero… ¿no queremos que cada día sea Día de la República? Lea nunca llega tarde…

gaviotas y arte III

15 Abr

Post dividido en partes – consecuencia de verborrea extrema por contención forzada y de larga duración.

Aseel, de Palestina, y Astar, de Israel, tenían rincones contiguos y en cierta forma eran similares. Aseel trabajó mucho los distintos aspectos del conflicto israelí-palestino, y muchas cosas de las que vi durante mi visita a Rosana las reconocí en sus instalaciones. Una de ellas era el Acuerdo de Oslo tiroteado en una ventana, había una chica asomándose a una ventana y marcada como el objetivo de un fusil, un collage con distintos pasaportes palestinos, una prueba de la existencia de aquellas personas, y un pájaro blanco atravesado por una enorme lanza. Astar trabajó más la guerra en general: un punto de vista más positivo con una instalación acerca de sueños, y una obra muy impresionante inspirada en el libro Johnny Got His Gun, una novela de Dalton Trumbo y que relata la historia de un soldado mutilado casi hasta la inexistencia en la Primera Guerra Mundial, sin extremidades, rostro ni sentidos, que consigue comunicarse dando golpes con la cabeza usando el código morse, y que antes de morir desea ser exhibido como ejemplo de los resultados de una guerra con un cartel en el que se lea “This is war”, un deseo que le es negado en el libro, pero que Astar le concede. Escalofriante.

Oslo Agreement

Johnny Got His Gun

También estaba Michael, un chico árabe-israelí, residente en Israel, que se inspiró en la historia real de cuatro chicas de la sociedad nómada que se ahorcaron porque les fue prohibido ir a la escuela. Gracias a los espejos usados, el espectador podía ver los cuatro pares de pies colgando en el aire y los propio simplemente caminando al lado…

Zukhra, de Tajikistán, presentó varios retratos, autoretratos y representaciones de figuras femeninas muy interesantes, jugando con las posiciones del cuerpo, la luz y los espejos.

Alexandra, de Noruega, tenía como elemento principal dos vestidos, uno de novia y otro para un funeral que me hizo a medida (“Lea, te voy a usar a ti, que eres pequeña y no necesitaré mucha tela”): Fue muy divertido ayudarla y ver el resultado final, pero me gustó más sus pinturas y collage: mimos, una pareja casi abrazándose, dividida en varios lienzos, y una composición que utilizaba una calle cualquiera como fondo y mezclaba varias frases, acerca de calcetines que no pegan, el no poner metal en el microondas y no comer helado con queso.

Agnes (Suecia) tenía un rincón que creo que le hubiera gustado a Andrea igual, o más que a mí. Había trabajado con textiles: latas con abrigos de punto, tres pequeñas figuras montadas en un cojín flotante y lo que, para mí, era la obra maestra: una alfombra de punto usando… medias de seda.

Otras obras que me gustaron fue el vestido de Astrid (Dinamarca), bonito por fuera, pero iluminado desde el interior, donde guardaba basura, botellas vacías y otras cosas que debían ser escondidas… Nicholas (Noruega/Nueva Zelanda) expuso un lienzo cuyos autores éramos todos nosotros: un buen día se sentó en la kantina durante la cena y nos pidió dibujar nuestra idea de tiempo. Añado mi detalle, un hombre gris del banco del tiempo (leed o releed Momo, de Michael Ende, yo tuve unas ganas de hacerlo…). Y quizá veáis por allí un laberinto… Me encantó la cerámica esmaltada de Ingeborg (Noruega), una calavera y varios animales marinos, un detalle del cuadro Cycle, de Jennyfer, y otro de un cuadro de Anyuri, mi compañera de cuarto.

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Acabo con uno de los preciosos y delicados dibujos de Natalia (Ucrania), otra compañera de cuarto, parte de su ciclo Cycle of Life. ¡Uno de mis favoritos!

gaviotas y arte II

15 Abr

Post dividido en partes – consecuencia de verborrea extrema por contención forzada y de larga duración.

Observé los distintos caracteres de cada rincón y de sus creadores: se veía revolución e ironía, interés por las personas y sus semejanzas y diferencias, trabajo con lana y textiles, diseño de máquinas y una representación de su belleza y su brutalidad, la pasión por la música, la guerra y los muros, el viaje exterior e interior, las edades y los cambios por los que pasan los humanos… Temas en los que, me imagino, ocupan a muchos de nosotros.

Este pájaro de Tory (Estados Unidos) parece llevar un mantón de manila, de ganchillo, de encaje o de punto, que puede abrigarle, decorarle o pesarle tanto que no puede volar…

Maksim tenía la esquina más cínica y crítica con la hipocresía de la sociedad actual. Mis favoritos: una pequeña figura de cerámica, un miembro de la Iglesia, quemando un condón; una serie titulada Good news, de fotos muy conocidas de la guerra de Vietnam en las que superpuso a la fotografía una capa “positiva” brusca, de contraste, colorida y con motivos navideños, flores o juguetes.

Sin embargo, creo que el que más me gusta es el que he añadido más grande al final, donde a primera vista no se puede apreciar muy bien qué es lo que “falla” en esta imagen. Mientras que en las otras dos las expresiones de los retratados y el entorno destruyen en seguida la primera impresión de “buenas noticias”, en esta tardé unos segundos en reconocer que de los hombres que parecen estar simplemente caminando por la calle, en realidad uno le está pegando un tiro al otro.


Por último, está esta instalación, tristemente muy apropiada para nuestro colegio, donde poner candados y clavos a las cosas parece ser la única medida efectiva para evitar las continuas y vergonzosas desapariciones de cosas tan sagradas como la comida o los paquetes que llegan de casa.

Øystein tenía como tema las máquinas, su utilidad, su belleza y su crueldad. Había construido una máquina impresionante, una bomba de petróleo, que intentó poner en funcionamiento sin mucho éxito desde el punto de vista práctico, pero con el efecto deseado desde el punto estético, algo que se completó cuando quemó la maqueta a la noche siguiente. Además, encontramos el diseño de una máquina para hacer círculos en los campos de maíz, y un contraste impresionante entre un bonito vehículo parecido a un barco colgado cerca de la ventana y tirado por pájaros de papel y el dibujo de un cisne sufriendo aprisionado entre las pinzas de una máquina. También me gustaron los esbozos de figuras femeninas que había hecho con un modelo real. Me explicó cómo él mismo no estaba satisfecho con todas ellas, ya que para dibujarlo bien había que sentir la atracción hacia a mujer en cuestión, para capturar bien las curvas, formas y sombras, y me enseñó los dibujos o detalles en los que lo había conseguido.

Uno de los rincones que más me ocupó fue el de Linh, nuestra segundo año de Vietnam, lleno de colores en distintos cuadros. A parte de encontrarlos preciosos desde una perspectiva visual (por supuesto), fue curioso la percepción tan distinta que había tenido yo con respecto a la motivación inicial de ella, sobre todo en el caso de este cuadro, llamado Abortion.

Sin haber leído el título, la extraterrestre me parecía guapa, alguien hacia la que sentía simpatía, y que acariciaba a su hijo y estaba pensando en él. Mientras pensaba ésto, a mi lado Linh comenzaba a describir la crítica a la sociedad que representaba, que ella odiaba a ese alien, que había dibujado lo más fea posible y que estaba usando tecnología para librarse del bebé, de un error. Todo su rincón era una crítica a los valores de la sociedad occidental actual, y yo no estaba de acuerdo para nada con muchos aspectos de ésta.

También pasé tiempo delante de esta obra, Mirror, en la que podía ver a mi segundo año de Pakistán, Naina, una chica que da mucha importancia a los valores de su sociedad y que tiene una belleza muy natural, contrastando con la otra mitad del cuadro, un conjunto de recortes entre los que se puede reconocer una cara de una modelo. Linh quería representar su crítica al concepto de belleza que predomina en el mundo occidental hoy en día, el uso de cirugía estética para cambiar nuestros cuerpos, y el olvido de la “auténtica” belleza, la que nos viene de forma natural y por nuestra cultura. Al principio la forma en la que lo dijo no me gustó, pero ahora creo que lo entiendo mejor (si es que como Leo que soy, me dejo llevar demasiado por la primera emoción que aparece). En mi opinión, la cirugía estética no es nada malo o despreciable desde un punto de vista objetivo (yo no creo que lo haría), pero entiendo a tristeza de Linh ante el hecho de que una belleza como la de Naina no cumpla los estándares de una sociedad y que algunas personas consideren necesario cambiarla o eliminarla con cirugía.

sauna-life

21 Ene

Tener la piscina a dos minutos de casa es un gusto, y un placer enorme cuando encima tiene una sauna. Hoy después de hacerme mis cincuenta largos (tengo que presumir un poco mientras me duren los propósitos de año nuevo), entré en la sauna y había cinco mujeres, ya de cierta edad (pero llevada muy bien), que acababan de terminar su clase de gimnasia acuática en la piscina de agua caliente (podía oir la música entre un largo y otro) y charlaban animadamente en noruego. Cuando entré yo, lejos de producirse un silencio incómodo, cambiaron en seguida al inglés y me preguntaron si era del colegio, de dónde era… y acerca de mi maravilloso bañador, que hace pensar a la gente que soy nadadora profesional. Cuando les expliqué que servía muy bien para nadar en el fiordo, me contaron acerca de un club de mujeres en Dale que se bañan todas las semanas, sin importar temperatura ni fenómenos meteorológicos, en el fiordo que tienen al lado de casa. Por lo visto se trata de un club “de élite” al que hay que enviar una petición de entrada y pasar un escrutinio para ser aceptada, pero aún así me hace cierta gracia la idea… La conversación pasó por las distintas experiencias acuáticas de cada una de nosotras, y yo estaba maravillada por la facilidad con la que habían cambiado a otro idioma que usaban incluso entre ellas (algo que no ocurre siempre en el colegio) y que no había ralentizado la conversación en absoluto, lo amigables que eran y la complicidad de aquella habitación calurosa y húmeda. Una de ellas, que por lo visto es bióloga o algo similar, nos contó de sus estudios sobre las poblaciones de medusas en el Mar Negro, que entran con los barcos que pasan por el estrecho de Bósforo y son una auténtica plaga, y así llegamos a hablar sobre trabajos y estudios. La bióloga y otra mujer trabajan en el centro de arte de Dale, que parece desarrollar bastantes proyectos interesantes. En este punto de la conversación, se fueron saliendo las demás mujeres, que habían pasado allí más tiempo, y quedamos solas yo y la otra mujer del centro de arte. Le pregunté más acerca de su trabajo y resulta que…

Ella se llama Cécile Belmont y es francesa. Ha vivido en París, pero también en Buenos Aires y Berlín tiempo suficiente como para hablar ambos idiomas perfectamente. Es artista y trabaja sobre todo con la fotografía, y ahora ha venido a Dale por tres meses con una beca. No sé si a vosotros no os llaman la atención ciertas similitudes con otra persona… El caso es que como parecía simpática y entre todas habían despertado mi curiosidad acerca del centro de arte de Dale, quedamos en que le escribiría para que ella tuviera mi dirección de correo electrónico y me pudiera mandar de vez en cuando el programa del centro.

 

Salí de la piscina de muy buen humor. Con lo aislados que estamos aquí, siempre se agradece hablar con una persona “normal”, una persona de fuera de la burbuja, y charlar con todas esas damas noruegas en la sauna, y encontrarme entre ellas a una artista francesa que habla los mismos idiomas que yo y parece interesante, ha estado genial.

No sé si os acordáis de la entrada que escribí el agosto pasado, cuando todavía vagueaba y disfrutaba de la buena vida tumbada al sol a las orillas del fiordo, sobre la visita que recibimos de una tocaya mía (casi tocaya), de madre alemana y padre español. Fue algo parecido. Estás a lo tuyo, que si piscina, deberes, actividades, amigos, y de repente las moiras que hilan tu destino te ponen delante de las narices a una persona que tiene muchísimas cosas en común contigo. O a personas que no podrían tener menos, pero que te hacen sentir bienvenida en una sauna.

Os dejo el link a la página web de Cécile y del centro de arte:

www.cecilebelmont.com

www.nkdale.no

Detalle de Avoir un coup de pompe

de la colección Between dog and wolf,

en la que Cécile Belmont escoge dichos populares franceses y representa su significado.

«»Avoir un coup de pompe» significa en español «tener un bajón de ánimo».

als hätten wir nichts besseres zu tun…

10 Sep

Eso, como si no tuviéramos nada mejor que hacer una tarde entre semana que pasar una hora sentadas en el sofá, haciendo punto. Pues quizá no teníamos nada mejor, porque a mí me ha gustado muchísimo. Ha sido relajante (por el movimiento uniforme y el contínuo «contar hasta diez»), productivo (he hecho como unas quince líneas de lo que será una bufanda ancha y multicolor, pues no creo que haya lana suficiente para acabarla en gris y turquesa) y sociable. Lamentablemente no hemos contado con la presencia (que hubiera sido admirable) de un chico, pero a cambio hemos tenido una agradable charla, medio en alemán, medio en inglés, y me he sentido muy unida a mi abuela, que me enseñó a hacer punto, y muy a gusto, casi como en casa. Sólo nos faltaba el té, la manta y la chimenea, pero quizá eso se vaya sumando en invierno. Yo ya he decidido que me llevaré mis ovillos de lana y mis agujas a las reuniones del Cuerpo de Estudiantes (sí, sí, el Student Body) y a World Today (el foro de debate de los viernes), para evitar tensiones innecesarias. Y si tuviera sentido llevármelo al cine, pues también lo haría, porque para las películas que ponen…

Meta, mi coaño alemana.

Ulrika, la maestra, con Meta.

Angie, una profesora de inglés, y Ashley, una voluntaria. Contamos además con la presencia de Maria, una voluntaria alemana, y Tory, mi segundo-año de Estados Unidos.

Mi obra.

Por la noche fui al Hoegh, donde tuvo lugar la celebración del Año Nuevo judío. Un grupo de estudiantes, que vienen de familias judías, organizaron una cena típica e invitaron a unas veinte personas para acercarnos a las tradiciones relacionadas con la fiesta. Primero disfrutamos de un auténtico banquete, empezando por unas pocas lágrimas de granada, para que hagamos tantas acciones buenas como semillas tiene la fruta, y manzanas untadas en miel, para que nuestro año sea igual de dulce y bueno. Continuamos con pescado, del que en realidad se come la cabeza, pastel de miel y pan hecho por ellos mismos. Todo estaba sencillamenre delicioso. Sólo nos faltó el vino, pero no está el patio como para hacer muchas bromas con eso. Una vez terminamos de comer, nos sentamos en un círculo y ofrecimos chocolate a aquellas personas a las que queríamos bendecir. Fue muy bonito: una persona cogía el plato y se sentaba delante de aquél al que estaba destinado el deseo, le contaba algo, le daba las gracias por un favor, le deseaba lo que quería desearle y le pasaba el plato para que a su vez escogiera una persona. Podríamos haber seguido bendiciéndonos los unos a los otros durante un buen rato, pero se nos acabó el chocolate.

Desde aquí un trozo de chocolate virtual, y feliz año 5771. ¡Shaná tová!

P.S.: Por cierto, estoy en clase de español. María Teresa se ha ido al dentista. Todos los latinos armando escándalo, discutiendo a ver quién pone la música y haciendo esas cosas que hacen los alumnos cuando no está la profesora. Estudiar responsablemente, claro. Eso es igual en todos los colegios, da igual si son del Mundo Unido o no. Y yo que había venido a pasarlo bien, escuchar salsa y demás… Mejor no digo nada, que esté donde esté, en este sitio siempre soy minoría.

Evolución de Lea a lo largo de la parte seria de la clase (informal). Serie tomada a traición por Rodrigo, mientras argumento con pasión sobre los temas comunes de La gallina degollada, A la deriva y Almohadón de plumas, de Quiroga. Si es que soy una alumna ejemplo: levanto la mano, intervengo, escucho y tomo notas.

sleep bomb, sleep bomb…

5 Sep

Hoy no ha sido uno de los mejores días de la RCNUWC-Experience, y eso que ha sido un domingo. Véis, si es que al final va a resultar que los fines de semanas son malos. Aquí son un poco malos porque no se duerme lo suficiente. Ayer me fui a la cama tarde, no me acordé hasta el último momento de que hoy teníamos Advisor-trip, es decir, que nos fuimos todos los que tenemos el mismo tutor/Advisor de excursión a un lago no muy lejos de aquí. Lo que podrían haber sido unas bonitas horas al sol en un marco incomparable se convirtió en un auténtico rollo por mi dificultad en mantener los ojos abiertos. La falta de sueño produce un comportamiento anti-social, después de un baño en un lago noruego es imposible entrar en calor, el taco de deberes se distorsiona y parece el triple de grande, el Bachillerato en general crece hasta convertirse en una montaña de 12º grado, imposible de escalar, y nadie te quiere.

Mañanas de niebla…

Vamos, que no estaba del mejor humor y tenía que hacer deberes, así que encima cometí el terrible error de intentar estar con la gente y hacer deberes a la vez, cosa que con algunos «elegidos» funciona bien, con el resto de la gente, mal. Ya os podéis imaginar que en las próximas dos horas las pasé sin hacer ni lo uno, ni lo otro, atascada en mi análisis literario y odiando el mundo en general. Porque nosotros en España lo único que hacemos es sacar patatas de la tierra, hacer tortilla de patatas, comer tortilla de patatas, cantar flamenco y torturar toros, y un análisis literario como Dios manda no lo he hecho en la vida y mañana a primera hora tengo clase con María Teresa y vaya primera impresión voy a dar y a ver qué reflexión profunda me suelta.

Es que estoy en una edad muy difícil.

Bueno, mi salvación fue un encuentro en el Silent House (lo siento, pero la traducción suena demasiado tonta) sobre el significado del Ramadán, que me vació un poco la mente de mis pequeños problemas y me hizo pensar en otra cosa. Fue una experiencia muy interesante, no tanto por los pequeños matices que se añadieron a mi imagen del Islam como por la participación de diferentes personas que aportaron cada uno su punto de vista, a veces muy distintos entre sí. un claro ejemplo de que la religión puede ser después de todo flexible y abierta a interpretaciones personales… Después limpié el baño, lo cual me hizo sentir mucho mejor (sí, sí, alegráos en Puentetoma, cuando vuelva me podéis poner a fregar el váter) y después Karolina y yo nos fuimos al Hoeg a hacer nuestros deberes «de verdad». He escrito seis páginas sobre un texto de medio folio, lo cual no quiere decir nada, pero por lo menos me hace sentir satisfecha conmigo misma. Así que aunque la vida sigue sin ser fácil por estos lares, ya me he recuperado del pequeño bajón, también gracias a las ingentes cantidades de chocolate que he devorado y al blog, que se está convirtiendo, como ya predijo Andrea, en una especie de terapia.

… tardes de paseo. Vista desde nuestro lugar de escalada.

Procedo pues a contaros lo que he estado haciendo estos dos días, que no ha sido poco.

El viernes probé la actividad extra-académica de escalada. Nos fuimos por dos horas a unas rocas no muy lejos del campus y nos dejaron probar algunas vías. Las rocas son diferentes a la caliza familiar de Recuevas, pero he hecho las dos vías que he intentado y me he acordado de Javi, mi «maeztro».

Lo he disfrutado mucho y estaba firmemente convencida de que ésta iba a ser una de las actividades elegidas para este trimestre, cuando vi al volver un papel colgado en el tablón de la kantina que anunciaba una actividad de construcción de barcos. Concretamente, se trata de hacer una réplica de un barco tradicional del siglo XVIII con otros cinco estudiantes y la ayuda del especialista Ove Losngard. Como necesitaban a muy poca gente, no lo pensé mucho y me apunté. Me ha dado pena por la escalada, pero ya lo haré en otro trimestre. Ahora estoy emocionada ante la expectativa de ponerme a serrar, martillear, medir, pegar y crear un auténtico barco vikingo. Sólo espero que valga la pena y haya tomado la decisión correcta. La esclada la dejo para el semestre siguiente.

El viernes tuvimos también nuestro primer World Today. World Today es un foro de debate semanal que trata temas de actualidad y proporciona un espacio para discutir, argumentar, escuchar, informarse y aprender a debatir. Empieza siempre con una breve introducción al tema, presentada por el grupo que lleva el foro y después sigue un sistema estricto de intervenciones y réplicas. Está liderado por Angelika, mi segundo-año de Alemania y tiene lugar en el auditorio, lo que le da un aura de importancia. Esta semana se ha tratado la guerra de Afganistán, cómo esta se puede ver afectada por el descubrimiento de enormes reservas de minerales en territorio afgano y cuáles deberían ser las reacciones de las potencias involucradas. Yo fui sólamente para escuchar y me pareció muy interesante. Se quedó un poco atascado en el medio, dando vueltas y vueltas a lo mismo y de vez en cuando me pareció que se hacía demasiado personal, pero por lo demás fue estupendo.

Luego el club de cine proyectaba una película, como todos los viernes. Pero no parece que la calidad vaya en aumento, así que yo me decidí a formar parte de la resistencia y negarme a ver «Crepúsculo», ni siquiera por su dudoso valor cómico. Sinceramente, me sorprende la selección de películas del club del colegio. Sin tener nada en contra de «Crepúsculo» y sus miles de millones de fans, creo que es una película que se puede ver perfectamente con unos amigos en una habitación mientras se usa el salón de actos para algo más provechoso. Pero en fin… Degusté los pancakes de mi compañero danés Oliver (aquí ya ha comenzado la fiebre por las cosas precocinadas y la pasta con sabores artificiales) y a las once me fui al café Snikkarbua, donde la tarta de queso estaba de nuevo exquisita.

¿Qué hace una medio alemana, medio española, de 47 kilos en la barra de un parque infantil?

El tonto.

Ayer por la mañana nos fuimos a Dale, a ver los bailes tradicionales de las Islas Faroe, que se presentaban en un evento cultural. Lo que nos encontramos fue un grupo de personas mayores bailando en círculo, cogidos de las manos, siempre un paso a la derecha y dos a la izquierda, mientras uno de ellos cantaba canciones. Nos unimos y nos lo pasamos bastante bien, aunque los latinos no se pudieron reprimir comentarios mordaces acerca de la pasión y la sensualidad nórdica. Pero a mí me gustó el baile por parejas que nos enseñaron al final. No era especialmente rápido ni complicado, pero parecía ser muy bonito si se hacía bien. A veces las insinuaciones sutiles, la elegancia y las miradas entre los dos bailarines me parecen más interesantes que «menear el bullarengue» todo el tiempo. Tengo una respuesta estándar preparada para cuando me recriminan mi «frialdad europea» y mi poco espíritu latino, y es que nosotros tenemos otro tipo de llama, que no es tan obvia pero que cuando finalmente arde, calienta tanto como cualquier fuego latino. En fin, de alguna manera hay que defenderse, y a mí los ojos azules y fríos del chico ruso me parecen tan atractivos como los verdes y cálidos de mi compañero de Costa Rica…

¿Y qué hace un costarricense de… ¿60 kilos? en la barra de un parque infantil?

Pues el tonto también.

Por la tarde estuvimos viendo «Friends». Sí, ya véis que estoy llenando los imperdonables huecos en mi cultura general… He hecho una inusual cantidad de fotos de personas (Ben y yo somos los fans del detalle y de las «fotos de cosas»).

Así empezamos, y después de cuatro episodios estábamos despatarrados los unos encima de los otros. La vida del estudiante es dura, de vez en cuando es necesario distraerse un poco… De izquierda a derecha: Rafael de Venezuela, Rodrigo de Costa Rica, Samuel de Venezuela también, Mende de Bután y Karolina de Polonia.

Por la noche tuvimos el show de los segundos-años, que fue impresionante. Es increíble lo que un grupo de chicos de dieciocho, diecinueve años puede montar en dos semanas. Por un lado la parte técnica (el sonido, las luces, las mezclas, todo encajaba a la perfección) y por otro, las actuaciones: auténticos talentos en el baile, el canto, la comedia, el teatro… Desde una preciosa danza que hicieron el chico de Sri Lanka y la chica de Pakistán hasta un pequeño sketch sobre los «nuevos vikingos». Desde el Waka Waka bailado con mucha gracia entre otros por Irene, mi segundo-año, hasta una canción de Tracy Chapman interpretada por Irina, de Nepal. Desde chicos desnudos hasta genios de la geografía… El público aplaudió hasta rabiar y encontró inspiración de sobra para nuestro show, que es en dos semanas y que tiene que ser todavía mejor, si es posible. Lamentablemente, mis fotos del evento no valen para nada. Astar lo tiene grabado en video, así que a ver si podemos publicarlo de alguna manera…

Como se puede ver, tampoco se está tan mal por aquí. Sólo hay que dormir de vez en cuando, así que ¡buenas noches!